Hoy te voy a hablar de algunas de ellas y, en entradas futuras, las iremos viendo con más detenimiento.
Estructura en tres partes:
Esta es, quizá, la más conocida. Consta de:
- Un planteamiento, donde se expone el conflicto y se nos presentan a los personajes principales.
- Un nudo, donde el conflicto se desarrolla y aparecen nuevos personajes y conflictos secundarios.
- Un desenlace, donde el conflicto se resuelve, satisfactoriamente o no.
Estructura en cinco partes:
Es muy parecida a la anterior, solo que desarrolla algunas partes por separado. Consta de:
- El planteamiento, donde se nos presenta al protagonista en una situación inicial.
- El conflicto.
- El desarrollo del conflicto, que acabará en el clímax.
- Una cuarta parte en la que el conflicto amaina y se prepara el desenlace.
- El desenlace.
Viaje del héroe:
Consta de doce partes. Doce etapas que el protagonista recorre como si fueran las jornadas de un viaje.
Vasos comunicantes:
Presentan dos tramas en paralelo, en un principio inconexas, que comienzan a converger en un punto de la historia y se mezclan a partir de ahí.
Circular:
Es la que usamos cuando la historia termina donde empezó. El desenlace es un reflejo del planteamiento.
Y ahora cuéntame, ¿conocías todos estos tipos de estructura? ¿Los has usado en tus escritos? ¿Cuál es tu favorita? Déjamelo en los comentarios.
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